No fui una clienta de la firma, pero yo sí una empleada. Hice una pasantía en la firma, aunque fue solo una pasantía de verano, mi breve tiempo fue el mejor. Todo el personal fue muy amable y servicial. Julissa, mi entrenadora, siempre fue amable y muy paciente. Ella me explicaba todo si yo no estaba segura de una tarea. Siempre solía decirme: “-Jennifer no existe una pregunta tonta”. Aprendí mucho en esos 3 meses que me ayudaron a desarrollar un buen hábito de trabajo. La Sra. Rosenberg me dijo una vez que para tener éxito en este campo, debía “ser una esponja”. Siempre me recomendaba que absorbiera todo lo que pudiera, que aprendiera a hacer todo, no esperara a la próxima tarea para tomar la iniciativa y hacerlo por mi cuenta. Fue una experiencia enriquecedora. Gracias por todo chicos.